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Carlos Robles

Era “chueca” y plaqueada

De las diversas oficinas de Recaudación de Rentas que el Gobierno del Estado tiene distribuidas en las regiones y municipios de Coahuila, es en la de Monclova en donde más negocios sucios, tranzas o como se le quiera llamar, se han cometido, siendo lo malo que han estado involucrados empleados de la misma dependencia.

Mi Columna

Era “chueca” y plaqueada

Por Carlos Robles Nava

De las diversas oficinas de Recaudación de Rentas que el Gobierno del Estado tiene distribuidas en las regiones y municipios de Coahuila, es en la de Monclova en donde más negocios sucios, tranzas o como se le quiera llamar, se han cometido, siendo lo malo que han estado involucrados empleados de la misma dependencia.

No hace muchos años, un grupo de sujetos abordaba en las filas rumbo a las cajas, a quienes estaban esperando llegar a la ventanilla para pagar su tenencia vehicular, nuevas placas y otras obligaciones fiscales.

Al llegar ante su futura víctima, melosamente empezaban a platicar para a final de cuentas decirles esos individuos que tenían “conocidos” en el interior de la Recaudación y podían “arreglar” para pagar menos de lo que legalmente correspondía cubrir por la tenencia vehicular y demás trámites.

Una propuesta más era la de “condonar” o “reducir”, el pago de tenencias atrasadas, anteponiendo, claro, una “pequeña” gratificación por los servicios otorgados.

Efectivamente, los “trazas” o defraudadores, en efecto, entregaban los respectivos documentos, solamente que eran falsificados y en otros casos, se trataba de papeleo que sustraían indebidamente de las oficinas de la Recaudación en complicidad con gente de adentro, es decir, de verdaderos empleados de la Recaudación.

Cuando las autoridades sacaron a la luz pública este ilícito, sobraron monclovenses o residentes de los municipios cercanos que tramitaron en la Recaudación de Monclova, que acudieron a la oficina oficial recaudadora y encontraron con que igual que a otros los habían estafado.

No faltaron los que se manifestaron públicamente exigiendo se les reconocieran sus documentos apócrifos y no se les cobrara por lo que decían “ya habían pagado”, pero en esa ocasión las autoridades se fajaron al demostrar que los dineros pagados por ese “favor fácil” no había entrado a las arcas públicas y se inició una intensa campaña de orientación recomendándoles a los contribuyentes no aceptar propuestas de gestoría ningún trámite fuera al margen de las cajas de ventanilla.

Desgraciadamente, el ingenio, travesuras y sinverguenzadas de nosotros los  mexicanos, no se agotan, pues precisamente en este momento está involucrada la misma recaudación en una situación irregular, pues se plaqueó una pick up ilegal, chueca o “chocolate” introducida a México sin pedimento y demás documentos que se exige para legalizarla o convertirla en nacional y poder tener derecho de portar placas nacionales.

Esta anomalía más, casualmente salió a flote en uno de los tan cuestionados y rechazados, pero necesarios, retenes de verificación sobre la legalidad de las unidades motrices.

La primera semana de febrero, por una de las calles de Monclova, circulaba una camioneta pick up marca Chevrolet Silverado color blanca tripulada por un menor de edad, quien al pedírsele mostrara documentos, los mostró y dijo que la unidad motriz la había comprado con papeles originales de la propiedad, sin embargo, cuando se verificó su autenticidad en el banco de datos de la misma corporación policiaca, apareció como robada y, no siendo solo eso, al hacerse la revisión del número del motor, éste se encontraba alterado, por lo que era más chueca que un manco.

Si bien es cierto que el chavo por ser menor de edad, quedó pendiente su situación jurídica, es lamentable que en oficinas gubernamentales siguen cometiéndose situaciones irregulares e ilegales, pues es un hecho que si a la camioneta “chueca” o “chocolate” y además robada se plaqueó, es porque se le “ayudó”, claro, sin faltar la clásica mordida, porque en esa clase de delitos siempre hay mínimo dos partícipes, el que soborna y el que ejecuta. (www.intersip.org)