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Carlos Robles

No lo digan, actúen

Mi Columna

No lo digan, actúen

Por Carlos Robles Nava

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Una cosa es decir y otra actuar o hacer y es justo el caso de tantas advertencias y amenazas de sancionar económicamente y hasta llevar a la ergástula a quienes enciendan fogatas en los bosques o áreas arboladas de Coahuila y en este caso específico las autoridades se enfocaron a una intensiva campaña para proteger la sierra de Arteaga, Coahuila.

Durante la difusión de las medidas que se tomarían a quienes enciendan fogatas en áreas boscosas y de forma muy directa en la Sierra de Arteaga, las autoridades de los tres nivele  hablaron hasta el cansancio de sus compromisos, prometiendo tanto que en realidad la comunidad coahuilense solo escucha porque está consciente de que se repetirá la eterna historia de que no se cuenta con los recursos suficientes y si los hubiese sería el pretexto de que la  sierra de Arteaga es tan extensa que no se cuenta los suficientes elementos para desplegar una verdadera y vigilancia.

No solo las áreas boscosas de Arteaga, sino la “persistente” campaña de que “vamos hacer y actuar”, pero a final de cuentas no lo hacen, se han sumado las autoridades estatales del Medio Ambiente y las federales de Protección del Medio Ambiente y Recursos Naturales.

No es la primera vez que estas tres autoridades no se cansan de su cantaleta de que protegerán en especial la zona boscosa de Arteaga que en últimas fechas ha estado amenazada seriamente de ser dañada por irresponsables paseantes o vacacionistas al encender fogatas por más que se les dice que no deben hacerlo por el peligro que representa causar un incendio.

Se han convertido en toda una falacia las “buenas intenciones de las autoridades citadas que se ha tomado como tema de moda con declaraciones, ofrecimientos y compromisos incumplidos, palabras repetitivas como en anteriores épocas y todo queda en como siempre, en nada.

Ha habido harta difusión a las altas y dizque ejemplares sanciones económicas, así como a las penas contempladas en nuestras leyes para quien o quienes atenten en perjuicio del medio ambiente y directamente a la ecología de esa sierra y el resto de las zonas boscosas que en otras regiones de Coahuila.

Se dice que soñar no cuesta, aunque en este caso más que sueño se está mintiendo y engañando a la comunidad en general que ha perdido la confianza de sus autoridades responsables de proteger el medio ambiente para que no continúe la destrucción de los pocos bosques que quedan en la entidad, por cierto, la tercera de mayor superficie a nivel nacional, aunque en la mayoría de esos kilómetros predominan sus partes desérticas.

Precisamente por sumar más las zonas áridas en esos 151,595 kilómetros cuadrados de extensión territorial, aunque en honor a la verdad, la mayor parte de esa superficie es árida, es por lo que todos los coahuilenses nacidos aquí o no estamos no comprometidos, sino obligados a proteger y defender sus bosques.

Quienes deseamos un Coahuila más verde y menos destrucción de sus bosques, debemos y tenemos que levantar la voz para sacar de su pachorra a las autoridades que corresponde actuar y no solo decir y no hacer nada. (www.intersip.org)