Mi Columna
Va a todas y ninguna
Por Carlos Robles Nava
Hay políticos y gobernantes de todos los niveles que le apuestan a todo y nada, lo que es lo mismo le “apuestan a todas y a ninguna le dan”, lo que es justo lo que hace Andrés Manuel López Obrador, quien recientemente no esperó ningún segundo para adherirse al movimiento de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación y anunciar la organización de movilizaciones para que liberar a sus líderes, Rubén Núñez y a su compinche, Francisco Villalobos.
Andrés está más quemado que un “cuete” de pueblo y no deja escapar oportunidad alguna para tratar de que su nombre, aunque ya demasiado vapuleado, se mencione en toda actividad política, siendo uno de los ejemplos el anuncio de que se unirá a la lucha por la liberación de dos delincuentes, pues no hay otra manera de calificar a los dirigentes de la 22 de acuerdo a su detención que fue por tomar recursos públicos para su uso personal.
López Obrador, ha incursionado en no menos de cinco partidos diferentes, tras haber nacido dentro de las filas del PRI de Tabasco, la ciudad de las dos mentiras o sea Villa Hermosa, pues según sus mismos habitantes “ni es villa ni tampoco hermosa”.
Cuando el tricolor le negó su apoyo para postularse como aspirante a la gubernatura de Tabasco, abandonó a ese partido para fundar el Partido de la Revolución Democrática, PRD, de donde salió e ir al Partido del Trabajo, luego a Movimiento Ciudadano y aquietándose, al menos por ahora, al fundar su propio partido o sea Partido del Movimiento de Regeneración Nacional, conocido como MORENA.
El “dueño” de Morena, López Obrador, calificó a Enrique Peña, de cobarde, autoritario y arbitrario por el encarcelamiento de Núñez y Villalobos, por lo que protestará por esa injusticia.
Fue un poco más lejos con sus ataques al hacer público que el gobierno de Peña Nieto, es cueva de rufianes y son miembros de la banda de malhechores que tanto ha dañado a México.
Y como lo que busca Andrés es protagonismo, lo encontró al responder a sus señalamientos el líder nacional del PRI, Manlio Fabio Beltrones y el Secretario Federal de Educación, Aurelio Nuño Meyer.
Entre otros vaticinios de Andres Manuel, está el más reciente al decir que por tercera ocasión buscará la Presidencia de la República para el 2018, porque según dice “la tercera es la vencida”.
La verdad es que a don Andrés Manuel, ya ni el diablo le cree y lo que no puede negar es que ya encontró “modito” de vivir y bien con los recursos económicos que se da a su partido para gastos diversos que tienen los partidos políticos de México, conforme a nuestra ley federal electoral, así es que no te acabes “México, bendito y querido”.
Empero, mientras estos vividores de la política mexicana sepan manejar y “concientizar” sus simpatías entre cierto grupo de electores, seguirán pegados a las ubres presupuestales para llevar una vida placentera a costa de los impuestos de los mexicanos.
No es gratis el señalamiento remarcado que se hace sobre la labia y labor de convencimiento que tienen los políticos y gobernantes de los diferentes partidos para conservar sus nichos que les permiten tener una vida placentera sin trabajar. (www.intersip.org)